Como en el caso de la Lysimachia minoricensis, endémica de la Isla de Menorca, que se ha extinguido en la naturaleza y prospera en cambio magníficamente cuando se la cultiva en los jardines botánicos de numerosos países del mundo con climas muy distintos al de su isla natal, los Lotus canarios del grupo Heinekenia, llamados Pico de paloma, Pico de cernícalo o Hierba de plata, están en peligro crítico de extinción con poblaciones reducidas a unos pocos ejemplares, mantenidas artificialmente a base de repoblaciones de ejemplares cultivados a partir de esquejes, ya que su producción de frutos es tan escasa que resulta casi milagroso encontrar alguna legumbre con semillas viables.
Las flores del híbrido Lotus berthelotii x maculatus son espectaculares, como llamaradas de fuego volcánico.
Básicamente las especies del grupo Heinekenia endémicas de las Islas Canarias son tres:
-Lotus berthelotii, endémico de Tenerife, de flores escarlatas.
-Lotus maculatus, endémico de Tenerife, de flores amarillas con tintes anaranjados.
-Lotus eremiticus, endémico de La Palma, de flores de color ocre.
Mediante cultivo se han logrado seleccionar diversas variedades mutantes y algunos híbridos interespecíficos que difieren entre sí principalmente por el color de sus flores.
Lotus berthelotii x maculatus cultivado en un jardín de la Serra de Tramuntana de Mallorca.
Detalle del Lotus berthelotii x maculatus anterior con las últimas flores de la temporada, ya que suele florecer desde mediados de la primavera hasta principios del verano.
Flores del híbrido anterior.
Detalle del diseño y los colores de estas fantásticas flores.
Una de las flores anteriores del híbrido Lotus berthelotii x maculatus, cuya combinación de colores es claramente intermedia entre la de sus dos progenitores tinerfeños.
Mismo Lotus híbrido unos meses después, dia 1 de mayo de 2015. Recomiendo ampliar la foto con un doble click.
Hojas de Lotus berthelotii x maculatus, idénticas a las de sus dos progenitores, que presentan un color verde grisáceo por estar recubiertas de un polvillo ceroso, dando a la planta un aspecto plateado, de ahí su nombre de Hierba de plata.
Lotus berthelotii cultivado en Mallorca, idéntico a la forma silvestre tinerfeña, con sus flores de un intenso color escarlata.
Detalle de las flores de Lotus berthelotii.
Ramilla del Lotus berthelotii anterior con una legumbre llena de semillas viables, con toda probabilidad fruto de la polinización cruzada con un Lotus berthelotii x maculatus cultivado a su lado. En Mallorca no vive ningún ave canaria especializada en polinizar las flores de estas leguminosas, cuyos pétalos tienen la típica forma y disposición de las flores polinizadas por aves. Supongo que el polinizador de la flor no ha sido una abeja sino más bien un abejorro, pues se necesita una larga trompa y bastante fuerza para separar los largos pétalos y llegar así al néctar del fondo de la flor. Cabría también la posibilidad de que el polinizador hubiera sido un pajarillo, como los que polinizan las flores de mi gigantesco árbol Mundani, Sylvia atricapilla y Parus major. (Ver---> Acrocarpus fraxinifolius, un árbol para el futuro.)
Legumbre de Lotus berthelotii x maculatus llena de semillas viables. Al ser todos estos Lotus autoestériles, forzosamente necesitan el polen de otra planta para que sus flores sean fecundadas. Por lo tanto a la inversa que en la legumbre de la foto anterior, ésta ha sido polinizada con el polen del Lotus berthelotii cultivado a su lado. Se sospecha, aunque no existe ninguna prueba al respecto, que estas tres especies de Lotus endémicos de Canarias se han visto abocados a la casi extinción debido a la desaparición/extinción de su avecilla polinizadora y a la cada vez menor variabilidad genética de los escasísimos ejemplares que sobreviven en un espacio muy reducido sobre unos pocos peñascos volcánicos rodeados de pinos canarios.
La legumbre de la foto anterior al cabo de dos días cayó al suelo.
Al separar las dos valvas del fruto aparecieron siete semillas negras bien desarrolladas y con aspecto viable.
Hermoso ejemplar en forma de cabellera de Lotus maculatus var. Gold flame, una variedad cultivada de la especie silvestre, que fotografié hace unos años en un jardín de la Playa de Los Cancajos en la Isla de La Palma.
Las flores son bellísimas con unos colores muy vivos.
Detalle de las flores anteriores.
La inmensa mayoría de ejemplares cultivados proceden de la reproducción mediante esquejes de unas pocas plantas silvestres. Son por tanto clones idénticos entre sí con la misma dotación genética, de ahí la casi nula producción de semillas viables en las plantas cultivadas, ya que estos Lotus son autoestériles. En la media docena de poblaciones silvestres que suman en total las tres especies canarias también es casi nula la producción de semillas, de ahí que cada vez se acerque más su total extinción en la naturaleza. En varias de estas poblaciones ya no existe ninguna planta verdaderamente silvestre y todos los ejemplares proceden de repoblación a partir de plantas clónicas reproducidas por esquejes.
¿Se extinguirán como la Lysimachia minoricensis y sólo será posible verlos cultivados en parques y jardines?